La madera es un material natural, biodegradable, renovable y reciclable. Además es un buen aislante térmico y eléctrico.
Su resistencia suele ser directamente proporcional a la densidad, la cohesión entre fibras y al color.
El aluminio es ligero, resistente y de larga duración. Un excelente conductor de la electricidad y completamente impermeable e inodoro.